Virginia Stagnari pertenece a una quinta generación de vinicultores en el corazón de Santos Lugares en Canelones. Es una de las grandes mujeres del mundo del vino en Uruguay, y dirige las operaciones en la bodega de su familia - Antigua Bodega - donde su hija y su hijo se han unido al negocio familiar.

Amanda Barnes la entrevista acerca de cómo creció en el viñedo y cómo ‘encontró la luz’ cuando decidió trabajar en la bodega familiar. 

AB: Cuénteme sobre su experiencia de criarse en una bodega.

VS: Nací aquí en la bodega. Me crie rodeada de hombres que trabajaban en la bodega, en ese momento eran sólo hombres en la bodega y no abrían al público ni al turismo. En ese entonces, el negocio era de vino de mesa, que llenábamos en damajuanas. 

Mis recuerdos favoritos son de la cosecha, que siempre fue una gran celebración familiar. Todos nuestros primos venían aquí para la cosecha y era una celebración muy hermosa. 

A los 12 años, me fui a estudiar a Montevideo. Siempre pensé que estudiaría medicina, y empecé a estudiar en la Universidad, pero no me gustó tanto como pensaba. Fue entonces cuando mi padre me sugirió que trabajara con él en la bodega. Al principio me dediqué a las ventas, luego a la administración. ¡Hice un poco de todo para ser honesta! Seguí mi camino aquí, y descubrí una verdadera pasión por el vino.

"Trabajar ahora con mis hijos en la bodega tiene un gran valor sentimental para mí. No les pedí a mis hijos que trabajaran conmigo, pero ellos quisieron hacerlo. Lo llevan en la sangre también."

- VIRGINIA STAGNARI

AB: Usted fue la primera mujer que trabajó en la bodega, pero hoy la acompañan muchas mujeres en la bodega. ¿Ha visto un cambio en el papel de la mujer en el vino a lo largo de los años en Uruguay?

VS: Cuando yo era chica, las caras de las bodegas eran todas de hombres. Pero ahora estamos viendo muchas mujeres en el mundo del vino. En Antigua Bodega tenemos dos mujeres enólogas - Laura Casella y mi hija Mariana. Recuerdo el día en que mi hija le dijo a mi padre, su abuelo, que quería ser enóloga. ¡Podías ver el gran orgullo que sentía!

Hoy en día hay muchas mujeres en el vino en Uruguay y somos mujeres con mucha pasión por lo que hacemos. Veo mujeres de gran valentía y espíritu empresarial.  

También creo que la mano de una mujer en la elaboración del vino le da algo muy especial. La delicadeza de una mujer se ve reflejada en los vinos. Las mujeres son más sensibles y más detallistas en el momento de la creación.

AB: ¿Qué te impulsa a hacer vino fino hoy en día?

VS: Queremos tener los mejores vinos que podamos y queremos mostrar que Uruguay puede tener - y tiene - vinos de clase mundial. A veces nos faltan las herramientas, pero siempre tenemos la aspiración y el impulso. Mi padre era un apasionado del viñedo y del vino, y realmente lideró la conversión de nuestra bodega familiar a la producción de vino fino.

Mis hijos son ahora la sexta generación de productores de vino en nuestra familia, y lo que más buscamos es calidad. Calidad, diversidad y siempre innovación.

AB: ¿Qué tiene de particular ser un viticultor en Uruguay?

VS: El mundo recién está empezando a conocer Uruguay. Lo que nos distingue en el mundo del vino es nuestra tradición, nuestras familias y el hecho de tener muchas mujeres trabajando en la industria. Estas son las características que notan los extranjeros cuando nos visitan.

 Somos aventureros. Siempre estamos luchando contra nuestro clima, nuestra economía y seguimos luchando y avanzando. 

"Hacer vino en Uruguay es una aventura, y mis hijos y yo hablamos como si estuviéramos en una aventura juntos."

- VIRGINIA STAGNARI

Mi padre siempre decía: "Hay años buenos y años malos, pero no te preocupes, porque después de una crisis vienen los mejores años".

AB: ¿Cuál es el vino del que estás más orgullosa de haber hecho?

VS: Il Nero. Este vino fue un homenaje en vida que le dimos a mi padre. Se llama Il Nero porque la gente siempre llamó a mi padre "il nero Stagnari".

No fue fácil hacer este vino porque queríamos que fuera una sorpresa y mi padre siempre estaba en la bodega. Mi padre tenía un paladar exquisito y mis enólogos estaban haciendo esta mezcla especial para él de la cosecha 2009. Es 100% Tannat que ha sido envejecido en barrica durante tres años. Es un vino de estructura, color intenso y aromas complejos con un final largo, pero a pesar de todo esto es muy fácil de beber.

En 2014, se lo presentamos a mi padre. Falleció en 2015. Estaba muy orgulloso de este vino, y es un vino de muchas emociones.

AB: ¿Cómo ha evolucionado el estilo del Tannat uruguayo a lo largo de los años?

VS: Al principio, el Tannat era muy astringente. Pero hay que aprender a manejar el Tannat y conocerlo... ¡es como cuidar a un bebé! A lo largo de los años, hemos conocido mejor al Tannat en Uruguay y hemos aprendido a perfeccionarlo. 

Hoy en Uruguay tenemos vinos Tannat muy buenos, desde nuestros vinos más simples hasta los mejores. Nuestros enólogos siempre quieren que la fruta se exprese, ya sean vinos de Tannat madurados en barrica de roble o no.

"El Tannat nos abre la puerta a nivel internacional, pero también tenemos una excelente calidad en otras variedades."- VIRGINIA STAGNARI