INAVI PRESENTÓ SU NUEVA COSECHA: LA CASA PROPIA
INAVI PRESENTÓ SU NUEVA COSECHA: LA CASA PROPIA

“El pesimista ve la dificultad en cada oportunidad; el optimista ve la oportunidad en cada dificultad”. Con esta cita de Winston Churchill, el presidente de INAVI, Ricardo Cabrera, comenzó su discurso de inauguración de la nueva casa de la vitivinicultura uruguaya, en un encuentro que reunió a autoridades nacionales y departamentales, bodegueros, viticultores y amigos de la uva y el vino.

Con la presencia del presidente de la República, Luis Lacalle Pou, la vicepresidenta Beatriz Argimón, el ministro de Ganadería, Agricultura y Pesca, Fernando Mattos, el intendente de Canelones, Yamandú Orsi y otras autoridades, el Instituto Nacional de Vitivinicultura inauguró su primera sede propia en la ciudad de Las Piedras.

Se trata de un moderno edificio de 1700 metros cuadrados y un anexo de 900, sobre un terreno de 8240 metros, que conforman una estructura moderna, funcional, eficiente y sustentable, y concentra en un solo lugar la activa gestión de la vitivinicultura uruguaya.

En una privilegiada ubicación, la nueva sede -a cargo de los arquitectos Jorge Pérez Huelmo y Paula Miller- está integrada por oficinas administrativas y técnicas, un laboratorio de última generación, servicios complementarios y un área anexa destinada a depósito y cochera.

Luego del corte de cinta, las autoridades recorrieron el edificio y destacaron la pertinencia de esta obra, que pretende ser un lugar de encuentro para todos los protagonistas del sector.

“La historia del INAVI es un reflejo del pensamiento del maestro Churchill”, prosiguió Cabrera durante la ceremonia. “Nació en un mar de dificultades, pero a fuerza de tesón y responsabilidad, de la mira en el horizonte y de profesionalismo, siguió adelante. Y lo que es más importante, creciendo en la calidad de las uvas y los vinos nacionales, sin nada que envidiar a la libre competencia y con el objetivo a ser protagonista en los mercados de exportación, donde por naturaleza, clase e identidad, somos seleccionados permanentemente”.

Y agregó: “Esta sede, propia nada menos, que hoy tenemos el placer de presentar en sociedad, es el fruto de actuar con oportunidad en la dificultad. Construida y desarrollada con fondos propios, sin líneas de crédito a corto, mediano o largo plazo, ni préstamos que comprometan nuestra gestión ni de la de quienes nos sucederán. Evitando onerosos gastos de alquiler y mantenimiento de un edificio que cumplió su largo ciclo”.

El presidente de INAVI destacó además que esta casa es, en síntesis, “la demostración de un sector de la vida nacional, que es ejemplo de pujanza y crecimiento, con sinsabores y alegrías ante cada cosecha. Con inconvenientes que van solucionándose de modo equilibrado y sobre la base del consenso”.

Y finalizó: “Como presidente de INAVI pero antes que eso, como funcionario de esta casa desde hace ya más de treinta años, es para mí un honor estar junto a ustedes presentándoles nuestra nueva sede a la que serán siempre bienvenidos. Sigamos apostando a las oportunidades a pesar de las dificultades”.

El ministro de Ganadería, Agricultura y Pesca, Fernando Mattos, dio cuenta de la sensación indescriptible de alegría de los funcionarios y directivos de INAVI “por este sueño realizado. Un sueño que tiene mucho que ver con la historia de la vitivinicultura nacional. Esta es una decisión de modernidad y esa es una característica que ha venido acompañando a aquellos inmigrantes que introdujeron las primeras vides al Uruguay, siempre apostando a diversificar la producción nacional y a generar un producto de calidad. Esta sede es un antes y un después de la vitivinicultura nacional y va a generar un impulso que sin duda va a proyectar al país con uno de sus productos emblemáticos, frutos de la tierra y del trabajo de los uruguayos”.

Y como novedad, informó que se conformará un nuevo directorio de INAVI, que deberá diseñar un plan estratégico con un horizonte de 20 ó 30 años”.

El presidente de la República, Luis Lacalle Pou, felicitó a la familia vitivinícola por la concreción de esta obra. “Cuando me decían cómo se iba a hacer el edificio, con qué recursos y en cuánto tiempo, todo me parecía un poco arriesgado y osado de más. Pero hace tiempo que digo una frase que me gusta mucho y es que prefiero sujetar locos que empujar quedados”.

“Por supuesto que lo más importante -indicó- no son los ladrillos, los muros, las paredes ni el cemento. Los más importante es la gente. Y lo mismo en el sector vitivinícola. Por eso hoy me da muchísimo gusto encontrarme con veteranos amigos de toda una vida, amigos de varias luchas a veces con intereses contrapuestos”.

Sobre la conformación del nuevo directorio, anunciada por el ministro Mattos, Lacalle señaló que, luego de 8 años, “esto habla de madurez, habla de entender una cadena productiva que empieza en la vid y termina en una botella en un comercio nacional o internacional, que se sienta representada y se sienta virtuosa para cada uno de sus intereses”.

El mandatario agregó que si bien hay una tendencia mundial que muestra cada vez menos bodegas, “no quiere decir que Uruguay baje los brazos y lo dé como un hecho consumado. Nosotros estamos haciendo muy buen vino, la gente está valorando la marca país de nuestros vinos y tenemos que seguir trabajando. Conozco a muchos bodegueros que han estado por el mundo con sus vinos abajo del brazo y tenemos que trabajar en comercio exterior, afianzando el vínculo con el Ministerio de Relaciones Exteriores y Uruguay XXI. Porque sino le estamos poniendo una tapa a la olla a presión y se desvirtúa el mercado nacional”.

“Uruguay puede jugar en la cancha grande, está comprobado que cuando la gente viene, conoce a nuestros productores, conoce nuestra amabilidad, nuestra hospitalidad y después de todo eso concentrado en una botella, se enamora de nuestro país y el vino es uno de nuestros mejores embajadores”.